Esta elegante caja cuadrada, fabricada de manera artesanal, destaca por su acabado decapado en blanco que le confiere un estilo vintage y bohemio. Sus terminaciones doradas añaden un toque de lujo, creando un contraste armónico que realza su belleza.
La tapa de la caja está calada con el símbolo de la Flor de la Vida, un motivo sagrado que representa la conexión entre todas las cosas en el universo. Este diseño permite que la luz atraviese los intrincados patrones, generando un atractivo efecto visual. Perfecta tanto para almacenar pequeños objetos como para decorar, esta caja es una pieza única que añade un toque de espiritualidad y elegancia a cualquier ambiente.